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[Review] Still Corners: "Strange Pleasures" (8.5)

Cuando se anunció la triste muerte de Trish Keenan a inicios de 2011 me sorprendió mucho la cantidad de comentarios que se generaron por la noticia, y es que en ese instante creo que no estaba del todo consciente de la enorme aportación que tuvo Broadcast en la música que se está haciendo en la actualidad, hasta que más tarde ese mismo año me encontré con "Creatures Of An Hour", el primer álbum de larga duración de Still Corners. La suavidad y la calidez vocal que emanaba de cada una de las melodías era algo que en todo momento me remitía a los thrillers psicológicos de melancolía que Broadcast montaba dentro de sus discos, sin mencionar la estética vintage que se apoderaba de las ambientaciones de sus melodías. Si, ese debut fue algo realmente exquisito y muy saludable, y hasta cierto punto me atrevería a decir que Still Corners es un proyecto que debe Suceder, es necesario que su nombre comience a escalar posiciones, y aún más cuando esta dupla -en su formato de estudio- ha tomado el riesgo de ir incorporando otro tipo de elementos para "Strange Pleasures", ya que este nuevo material no es ninguna copia de lo que nos presentaron en su debut, y esta es una gran virtud de Still Corners; Digo, desde sus primeros sencillos siempre estuvo presente un sentimiento muy romántico y envolvente dentro de sus canciones sumergidas en panoramas lo-fi, como resultado de la terrible sensación de cuando se pasa por una ruptura en una relación, pero cada lanzamiento tiene pequeños detalles que los separan por completo de una manera muy delicada. "Fireflies" fue el fascinante primer bocado que pudimos saborear el año pasado como parte de lo que Tessa Murray y Greg Hughes nos estarían entregando este año y si, los sintetizadores son lo que encabezan la estructura general de "Strange Pleasures", ya que en él más que encontrarnos con los típicos susurros vocales que emanan un confort angelical, en este disco hay cortes más impulsados por la estética clásica del synth-pop y el new wave de los 80s como "Berlin Lovers". Por otro lado, no podemos hablar de inmediato de estos cortes, ya que el disco arranca de una forma en la que Still Corners se presenta como un proyecto completamente establecido, y que por fin ha encontrado una solida personalidad para poder crear canciones maravillosas de la talla de "The Trip" y "Beginning To Blue"; no es sólo la hermosa voz de Tessa, no son los constantes 'uhhh uhhhh', sino toda la instrumentación que la acompaña suena con una producción enorme, y esto es algo que se debe de señalar en letras grandes ya que este acto no es uno que porte con un gran capital como muchos otros, con todo y que pertenezcan a Sub Pop, sino que estas dos mentes en tan sólo dos años decidieron eliminar los dotes lo-fi que le inyectaban colores grises a sus composiciones, para generar un colorido destello a través de sus armonías, y con ello podemos dejar de buscar a Broadcast en este universo, aunque la delicadeza que los ha venido representando se haga presente en la envolvente "I Can't Sleep", para después adentrarnos en uno de los momentos más gloriosos de este material, al mando de la elegante guitarra que nos introduce de lleno al pegajoso coro de "All I Know". Seguro, puede que de primera instancia parezca que Still Corners nos está bendiciendo los oídos con composiciones que nos roben el aliento, pero en este disco han optado por adentrarse en mundos trágicos para no hacer de él algo completamente feliz. Además, me encanta que acomodaron muy bien el orden de las canciones, ya que al inicio están esos cortes en lo que todo parece transcurrir con una plena calma, pero a partir de "Fireflies" comienza un bloque en el que Still Corners comienza a expulsar ese encantador brillo que les comentaba al inicio de esta publicación, y el mejor ejemplo de esto son las notas con las que da inicio "Futureage". Aquí, parece que ha terminado un capitulo en esta historia que se fue escribiendo de un modo cuidadoso, y cuyo momento de intimidad se manifiesta en la acústica de "Going Back To Strange"; en él, solamente se respira un romance que nos impulsa a querer abrazar fuertemente a una persona mientras la temperatura va disminuyendo en el exterior, y con ello ligarnos de manera inmediata con los synths y el coqueto juego de platillos en "Beatcity". Bue, puede que este sea el corte más flojo de toda esta producción, pero eso no le quita ningún mérito a todo lo que hemos escuchado hasta el momento, y mucho menos viene a alterar el orden que nos fue preparando de la mejor manera para la oscuridad que compone el paseo nocturno de la dupla en "Midnight City". Obviamente, al ver la imagen de prensa que Still Corners presentó junto con los detalles de este material, podemos imaginar a ambos avanzando por las calles en una noche desoladora y llena de sentimientos encontrados mientras suena "Midnight City" de fondo, y esto sin tener en cuenta que la base tiene una clara influencia de "Lullaby" de The Cure. Es un sólido álbum, y me atrevería a decir que es el mejor material que Still Corners ha hecho hasta la fecha, ya que "We Killed The Moonlight" cuenta con esa visión que nos remite al pasado para ver lo que hubiera ocurrido si "Creatures For An Hour" hubiera sido creado con una mayor madurez, aunque con esto no trato de decir que ese debut haya sido algo desafortunado, ya que obviamente está muy lejor de serlo. El encanto de "Strange Pleasures" se hace notar en el corte con el que finaliza, ya que cuando entran los primeros segundos de "Strange Pleasure" queda exhibida la manera en la que Still Corners decidió segmentar el disco por partes: Una en donde la acústica proyectara una imagen limpia capaz de enamorar a cualquiera; otra en donde los synths proyectaran la habilidad de la dupla para crear un exquisito synth-pop; y la parte final en donde se muestran en su forma más oscura y envolvente que, justo cuando podría encontrarse con una barrera llena de limitaciones, encuentra el escape perfecto para liberarse de un modo en el que nuestra piel se mantenga erizada en todo momento gracias a la discreta flauta que aparece a la mitad de la canción. Si le razcan, puede que existan varias fallas en la estructura de Still Corners, pero la realidad es que por el momento llevan dos de dos, y no nos podemos quejar de nada, es un hermoso sueño.




Still Corners: Myspace / Twitter / Facebook / Bandcamp

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